Por: Manuel Emilio Duvalls Ledesma.
Bien, para poner en evidecia las principales diferencias existentes entre estos actores políticos
hemos de tener en cuenta las siguientes diferencias:
Los movimientos sociales se califican como actores colectivos caracterizados por una forma
poco estructurada, su discurso transversal y sus formas de actuación preferentemente no
convencionales.
Los partidos políticos son asociaciones voluntarias que proponen un programa de
intervenciones globales y compiten electoralmente por ejercer el poder institucional. Forman
una organización estable e institucionalizada.
La diferenciación entre ambos es clara, pero nos podría llevar mucho tiempo y espacio
definirla, por lo que simplemente me voy a centrar en las características básicas de ambos
actores, contraponiéndolas y por lo tanto mostrando las diferencias entre ellos.
Una de las principales diferencias con el partido político viene marcada por esa misma
definición, y por el hecho de que el movimiento social tratado se vincule a un problema o
situación específico siendo la característica del partido político más generalista.
Los movimientos sociales intentan cambiar el poder político, su estrategia y objetivos son
anti sistémicos, algo totalmente contrario a lo que pretenden los partidos políticos.
La relación entre los movimientos sociales y los partidos políticos suelen ser conflictivas, ya
que los primeros exigen cambios en las decisiones del poder político. Suelen poner en
evidencia la inactividad de los partidos políticos o la falta de entendimiento de los problemas
reales de la sociedad.
La organización de los movimientos sociales es horizontal e informal, mientras que los
partidos políticos suelen organizarse de manera piramidal a partir de unidades territoriales de
base de las que van surgiendo escalones.
Los partidos políticos suelen tener un grado de estructuración mucho más fuerte y estable que
los movimientos sociales donde este suele ser más variable.
La participación en los movimientos sociales es voluntaria sin que se les imponga la
participación obligatoria en la misma, algo que también ocurre en los partidos políticos.
Los grupos representados por los movimientos sociales son indeterminables en la mayoría de
ocasiones.
El discurso de los movimientos sociales es transversal a favor de la justicia la dignidad y la
solidaridad; mientras que en los partidos políticos este suele ser un discurso global.
Los movimientos sociales suelen actuar principalmente a través de acciones políticas no
convencionales, al contrario que los partidos políticos, que suelen utilizar las convencionales
y las vías institucionales. Aun así, los movimientos sociales llevan a cabo acciones
convencionales como la presentación de la ILP (Iniciativa Legislativa Popular) a favor de la
dación en pago retroactiva.
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